descripción
Piazza del Popolo
Via del Babuino, Via Ripetta y Via del Corso, las tres arterias principales del centro histórico de Roma, confluyen en Piazza del Popolo. Retrato del mecenazgo papal del Renacimiento, antigua sede de juegos, ferias, espectáculos populares y ejecuciones capitales, la plaza se encuentra indudablemente entre las más famosas del mundo. “Felici faustoque ingressui MDCLV” (“Por una entrada feliz y dichosa”): éste es el mensaje grabado por Bernini en la Puerta del Pueblo (Porta del Popolo, la antigua Porta Flaminia) en ocasión de la llegada a Roma de Cristina de Suecia; esta puerta acoge hoy a todos los millones de visitantes que cada año llegan para admirar las maravillas histórico-culturales de la plaza. Las dos iglesias gemelas de Santa Maria di Montesanto y Santa Maria dei Miracoli, el Obelisco Flaminio (el más antiguo y el más alto de Roma) y las dos fuentes de Valadier contribuyen a plasmar la fascinante atmósfera de la plaza. Aquí encontramos también la iglesia de Santa Maria del Popolo, edificada sobre el lugar en que se enterró a Nerón y su alma maldita, y los locales comerciales contiguos, que ya son parte de la plaza y que antiguamente fueron frecuentados por personajes queridos por la historia de Roma, como Trilussa, Guttuso y Pasolini: todos estos sitios hacen que Piazza del Popolo sea el emblema cultural de la “esencia romana”. Desde Piazza del Popolo, atravesando toda Via del Corso, se puede llegar a todos los puntos de interés de la ciudad: Piazza Colonna, Montecitorio, Galleria Umberto Sordi, Fontana di Trevi, Piazza Navona, Pantheon, Campo dei Fiori, Piazza Venezia, Piazza del Campidoglio.
Pincio e Villa Borghese
Un gran pulmón verde, así se presenta en el mapa el parque más famoso de la Capital. A pesar de encontrarse en el tercer puesto por extensión, después de Villa Doria Pamphili y Villa Ada, Villa Borghese es sin duda alguna el parque más vivo y más querido de Roma. La Villa tiene muchos rostros y ofrece ocio y diversión de diferentes tipos: la aprecian quienes aman pasear y correr al aire libre y las familias que se juntan sobre el césped alrededor de variopintos pícnics; también los que aman el arte, que disfrutan de la presencia de numerosos museos, como la gran galería de arte moderno o el original museo etrusco y la colección del Museo Carlo Bilotti, hasta llegar a la joya de la corona de la Villa, representada por el Museo y Galleria Borghese en cuyo interior es posible visitar una de las más importantes pinacotecas de Roma y las maravillosas esculturas de Bernini. En el interior del parque un vasto jardín zoológico, el Bioparco, acoge una gran variedad de animales que cada año atrae a miles de visitantes, y un teatro de estilo victoriano, el Globe Theatre, prácticamente idéntico al de Londres, ofrece en verano una temporada teatral digna de mención. Pero las atracciones del gran oasis verde no han terminado: los niños pueden disfrutar en Casina Raffaello, la ludoteca a ellos dedicada, los amantes del cine tienen un espacio creado justamente para ellos, la Casa del Cinema y, para terminar, cada primavera en la zona del picadero se desarrolla el concurso hípico denominado Piazza di Siena con el esperado Carosello dei Carabinieri (ceremonia militar del 4° Regimiento de los carabinieri a caballo).
Piazza di Spagna
La plaza, así denominada por la presencia de la Embajada del Estado Ibérico ante la Santa Sede, se extiende a los pies de la colina Pincio y en el centro está adornada por la singular Fontana della Barcaccia de Pietro Bernini, padre de Gianlorenzo. La fuente se construyó para recordar una dramática inundación de la ciudad causada por el desbordamiento del río Tíber (Tevere). La maravilla de quien visita Piazza di Spagna por primera vez se dirige enteramente a la espectacular escalinata, obra de F. De Sanctis y A. Specchi (1721 – 1725), que hace que la plaza constituya la más alta realización urbanística del setecientos romano. En la esquina derecha de la escalinata se encuentra la casa del poeta inglés John Keats, que aquí vivió y murió en 1821, hoy convertida en museo dedicado a su memoria y a la de su amigo Percy Bysshe Shelley, llena de libros y recuerdos valiosos del Romanticismo inglés. En la esquina izquierda, en cambio, encontramos el salón de té Babington’s fundado en 1893. Por el lado de Via Frattina se alza el Palazzo di Propaganda Fide, propriedad de la Santa Sede. Delante de su fachada, diseñada por Bernini (mientras que la fachada lateral es de Borromini), se eleva la columna de la Inmaculada Concepción, que se erigió a los dos años de la proclamación del dogma. Subiendo todos los peldaños de la escalinata, se llega a la plaza superior donde se elevan la majestuosa fachada y los campanarios gemelos de la Iglesia Trinità dei Monti, que el gobierno francés mandó edificar para que los fieles residentes en Roma tuviesen su propio lugar de culto. En el interior de la iglesia se pueden admirar dos frescos (Asunción y Deposición) de Daniele da Volterra (siglo XVI). La plazoleta delante de la iglesia ofrece una bonita vista de la escalinata y de Via dei Condotti, y un panorama de la ciudad en el que dominan las cúpulas de San Carlo al Corso y de San Pedro.
Via dei fori Imperiali
Los Foros Imperiales, situados en la homónima calle en una interesante posición entre el Anfiteatro Flavio (mejor conocido como el Coliseo) y Piazza Venezia, representan uno de los lugares turísticos más importantes de la Capital y del mundo entero. En la Antigua Roma Imperial representaban el lugar principal de la vida tanto pública como privada y, visitándolos, es posible volver atrás hasta la época más gloriosa de la Caput Mundi. Desde la entrada, situada justo en Via dei Fori Imperiali, se accede al área y enseguida se encuentran los restos del Templo de César, desde el que se llega fácilmente a la Piazza del Foro, antiguo eje de la vida ciudadana, en cuyo centro se encuentra la Columna de Focas. A poca distancia se encuentran los restos del Arco de Septimio Severo, del Templo de la Concordia, del de Vespasiano y el de Saturno. Continuando la visita se encuentra el Templo de Augusto, la Basílica de Massenzio (llamada también de Constantino), los restos de la Iglesia de Santa Maria Antiqua, la Casa de las Vestales, la Iglesia de Santa Francesca Romana, el Arco de Tito, los Jardines Farnesianos, la Casa de Augusto, la Domus Flavia, en la que antiguamente residían los emperadores, y el Estadio Palatino.
Museo Maxxi
En el barrio Flaminio, en el interior del área del antiguo cuartel militar de Montello, la arquitecta anglo-iraquí Zaha Hadid, elegida entre 273 candidatos provenientes de todo el mundo, proyectó el MAXXI, el Museo nacional de las artes del siglo XXI. Un complejo de desarrollo horizontal pensado como un “delta con varios ríos”: ocho volúmenes longitudinales, entrelazados y doblados entre ellos que surcan un área de 30 mil metros cuadrados. Los espacios del interior están dedicados a la creatividad contemporánea, pensados como cajas que contienen la cultura, la experimentación, el estudio y la investigación.
Foro Italico
El Foro Itálico, en origen Foro Mussolini, es un gran complejo deportivo ubicado entre las laderas del Monte Mario y el río Tíber. Pensado para unir las disciplinas deportivas con la formación ideológica, se utilizó como escenario para las manifestaciones conmemorativas del régimen. Desde el punto de vista estilístico, los diferentes edificios están inspirados en los motivos del Monumentalismo clasicista y del Racionalismo italiano. El proyecto, ideado y realizado por Enrico Del Debbio entre 1927 y 1933 con la revisión de Luigi Moretti y terminado entre 1956 y 1968, a día de hoy se ve sometido todavía a modificaciones que alteran su perfil original. Los primeros edificios del complejo arquitectónico fueron la Academia de la Música (hoy Palacio del ISEF y sede del Auditorium RAI), la Academia de la esgrima, la Academia fascista masculina de educación física, el Estadio de los Cipreses (Stadio dei Cipressi) y el Estadio de los Mármoles (Stadio dei Marmi), decorado por estatuas que representan las diferentes disciplinas deportivas. La entrada principal del Foro está al sureste, en eje con el puente Duca d’Aosta donde, sobre una amplia avenida taraceada enteramente de mosaicos blancos y negros, se eleva un enorme obelisco de mármol de Carrara. Para las Olimpiadas de 1960 se añadieron el Estadio Olímpico y el Estadio de natación. Actualmente el Foro Itálico sigue siendo la joya de la corona del deporte romano: Estadio Olímpico para los partidos de fútbol, Estadio de los Mármoles para el atletismo, Estadio de natación y Estadio de Tenis, respectivamente para los internacionales de natación y tenis. El Centrale Live Foro Italico acoge en cambio conciertos y otros eventos extraordinarios.
Auditorium Renzo Piano
El Auditorium de Roma es un complejo multifuncional dedicado a la música, que contribuye a enriquecer el ya inmenso patrimonio de la Ciudad Eterna. El lugar elegido para la construcción del Auditorium se encuentra en la zona de llanura que se extiende entre las orillas del río Tíber y la colina de los Parioli, entre la Villa Olímpica construida en ocasión de los juegos de 1960 y el Palacio de los Deportes y el Estadio Flaminio proyectados por Pierluigi Nervi. Este sitio tan apartado presenta la ventaja de poder acoger y gestionar con cierta facilidad un gran flujo de público (gracias a las cercanas infraestructuras preexistentes), pero también la de ocupar un espacio que durante mucho tiempo representó una especie de fractura artificial, un “agujero” en el tejido urbano. La “ciudad de la música” se convierte así en un nuevo elemento urbano. La fractura ahora ha sido reabsorbida con un parque de unos 30.000 metros cuadrados, donde se han plantado 400 árboles. La abundante vegetación que hace de conexión entre el barrio romano Flaminio y la adyacente Villa Glori se abre para dejar sitio al anfiteatro, un focus urbano que forma una cuarta sala al aire libre, destinada a las representaciones y a los conciertos, donde pueden encontrar sitio unos 3.000 espectadores. El complejo comprende además una serie de espacios para actividades comerciales, recreativas, de estudio y exposición.
Ponte della Musica
El Puente de la Música conecta el barrio Flaminio con el barrio de la Vittoria. Proveniendo de Via Guido Reni, donde se encuentra el Maxxi, se llega hasta la Piazza Gentile da Fabriano, desde donde el puente se acerca al río Tíber, llegando al lungotevere (paseo que recorre el río) Maresciallo Cadorna. El puente fue construido por el estudio inglés Buro Happold Engineers, siguiendo el proyecto de Powell-Williams Architects, los cuales juntos ganaron el concurso internacional convocado en el año 2000 para la nueva obra cerca del río. El puente es de acero y hormigón, y mide 190 metros de largo y 22 de ancho. Las tablas de madera de los caminos laterales y algunos elementos arquitectónicos trasmiten la sensación de caminar sobre el puente de un barco. La apertura oficial del Puente de la Música tuvo lugar en mayo de 2011.
Trastevere
Trastevere es el barrio emblema del espíritu romanesco. Protegido por la colina Gianicolo, tiene una conformación única, hecha por callejones adoquinados, bonitas plazas animadas, casas maravillosas, tiendas y talleres,. Una escenografía urbana que invita a darse un chapuzón en el pasado. No es casualidad que muchas leyendas y tradiciones de Roma naciesen aquí. A todas horas, tanto de día como de noche, Trastevere se presenta siempre acogedor, animado y lleno de vida. Por el día sus callejones están animados por el comercio de las tiendas, por la noche el barrio se convierte en la zona de mayor concentración de la ciudad de pequeños restaurantes tradicionales, trattorie (mesones), bares y tascas. ¿Algún nombre? “La Sora Lella”, “Il Duca” y, por qué no, “La Parolaccia”, tasca histórica donde el personal está autorizado a insultar a los clientes para la diversión general de todos los presentes.
Basilica San Pietro
La majestuosidad de la fachada del siglo XVII de Carlo Maderno da una idea de las mastodónticas dimensiones de la Basílica de San Pedro, todavía hoy una de las iglesias más grandes del mundo.
La primitiva Basílica de San Pedro, un edificio de dimensiones parecidas a las actuales, fue construida alrededor del año 320 por orden del emperador Constantino en el lugar en que, según la tradición, había sido enterrado el apostol Pedro. A lo largo de los siglos y bajo diferentes pontificados, comenzó el largo proceso que, en aproximadamente doscientos años y con la participación de muchísimos artistas (Bramante, Michelangelo, Bernini), llevaría a la total reconstrucción de la primitiva basílica constantiniana. La cúpula ideada por Miguel Ángel sorprende por sus dimensiones y armonía, características que se aprecian en la dura pero gratificante subida que permite admirar de cerca tanto el interior como el exterior. Entre las muchas obras de arte no se puede perder la Piedad de Miguel Ángel, obra que sorprende desde hace siglos por su técnica y emotividad. Una espléndida columnata de 284 columnas dóricas y ochenta pilares de travertino de Tivoli rodea la Basílica de San Pedro, como si quisiera acoger en un simbólico abrazo a los fieles que llegan de visita. La magnífica arquitectura de la columnata fue encargada por el Papa Alejandro VII Chigi a Bernini, el cual dispuso de forma radial las cuatro filas de 284 columnas, aumentando gradualmente el diámetro de las mismas y consiguiendo así mantener invariadas las relaciones proporcionales entre los espacios y las columnas también en las filas externas. Gracias a este detalle, el espectador, al llegar a los discos de pórfido a los lados del obelisco, ve la columnata como si estuviera compuesta por una única fila de columnas.
Musei Vaticani
Los magníficos y enormes Museos Vaticanos representan uno de los complejos de museos másgrandes e interesantes a nivel mundial. Y justamente por esta razón las colas en la entrada son realmente larguísimas, sobre todo en las épocas de temporada alta, como Navidad, Semana Santa o a lo largo de la primavera. Conviene por lo tanto ir con mucha paciencia; sin duda, una vez llegados al interior, ¡habrá valido la pena!
De todas formas es preferible reservar la entrada online o directamente la visita guiada, ya que con esta operación se ahorrará tiempo y se evitarán las largas colas de la entrada. El complejo de los Museos Vaticanos incluye en su interior diferentes museos: Museo Pío Clementino, Museo Chiaramonti, Museo Gregoriano Etrusco, Museo Gregoriano Egipcio, Museo Gregoriano Profano, Museo Pío Cristiano, Museo Misionero Etnológico, Colección de Arte Religioso Moderno, Galerías Superiores, Museo de la Biblioteca Vaticana, Pinacoteca y, naturalmente, la inegualable Capilla Sixtina. Para visitarlos todos un día entero no es suficiente, por lo tanto sería mejor ir con ropa cómoda y decidir previamente lo que se quiere ver. El último domingo de cada mes los museos permanecen abiertos y la entrada es gratuita. Desde nuestro B&B es posible llegar a la Basílica de San Pedro y los Museos Vaticanos de esta forma: con el autobús n.o 982 (a 700 metros andando desde Via Giovanni Battista Tiepolo) en dirección estación Quattro Venti; bajar después de dos paradas en Roma S. Pietro. Como alternativa, con el tranvía n.o 2 en dirección Piazzale Flaminio; bajar en Piazzale Flaminio y coger el metro A en dirección Battistini, y bajar en la estación Ottaviano (desde Flaminio es una sola parada). Desde la estación de metro Ottaviano, en pocos minutos andando llegarán a destino.
